Ante un cliente más exigente, informado y una competencia cada vez más importante, con costes altos y márgenes ajustados, el sector turístico de importancia trascendental en nuestro país, debe ser mimado y renovado de forma constante.

Innovando nos hacemos diferentes a los ojos de nuestros cliente turista. Poner en valor los productos gastronómicos locales son una baza segura ya que responden a fuertes tendencias en el consumo turístico actual y podemos entender la experiencia turístico-gastronómica como clave para lograr esa diferenciación.

Algunas recomendaciones y reflexiones sobre las que podemos trabajar van de lo más conceptual a lo más práctico.

  1. Ponte en la piel de tu cliente, desde el momento en que decide cómo va a organizar su tiempo de ocio o sus vacaciones.
  2. Identifica tus valores diferenciales y fortalezas y poténcialos por todos los medios a los ojos de tu cliente.
  3. Piensa en cómo vas a conseguir que tu cliente, el turista que nos visita, viva una experiencia que no olvide.
  4. Trabaja los sentidos para que te ayuden a que ese recuerdo perdure: la música, el cuidado del ruido en los espacios, deleitando su paladar, la presentación de los platos, los aromas, las texturas de una tela…
  5. Ofrece opciones de ocio participativo que lo sorprendan. Explora tu creatividad.
  6. Escucha qué tienen que decirte tus proveedores locales, empleados, clientes…
  7. Participa en organizaciones de consumo colaborativo para hostelería también para obtener sinergias y diferenciarte.
  8. Personaliza tu comunicación con el cliente antes, durante y después de la estancia. Selecciona y cuida tu mensaje. Es tu imagen.
  9. Identifica el estilo de vida y sus preferencias y adelántate a sus deseos: personas que viajan solas, que viajan con mascotas, es un foodie, busca un estilo de vida saludable, es celíaco, busca la tranquilidad y el contacto con la naturaleza…
  10. Escucha a tus clientes en las redes sociales, habla con ellos, genera conversación, comparte los contenidos que más gustan.
  11. Organiza catas, degustaciones, talleres o cursos dentro de tu hotel, espacio, restaurante, bar…aprovecha el boom que está viviendo la gastronomía en España.
  12. Cuida el diseño y la decoración para transmitir los valores que deseas transmitir.
  13. Busca la felicidad de tus empleados, estén o no de cara al público. Ellos buscarán la tuya. El cliente hoy presupone la calidad y demanda la calidad social y responsabilidad con nuestro entorno.
  14. Facilita el acceso a productos locales con una presentación adecuada que puedan llevarse como recuerdo o como regalo.
  15. Sobre todo, piensa cómo conseguir que la experiencia con tu marca sea un recuerdo que no olvide.